Sin duda alguna el momento más emocionante fue la tarde del sábado, último día de septenario y ofrenda floral, cuando en el Ofertotio, este coro ofreció a la Santísima Virgen María, Divina Pastora de las Almas, un Sombrero de hilo de Oro, con flores de talco, nácar y coral, confeccionado por D. J. Benito Molero López y asesorado por Francisco M. Durán Gallardo, Antonio López Hernández y Lucío Rodríguez García, y una toca, para cubrir las sienes de tan bendita Madre. Fueron ofrecidos el Sombrero por Joaquín Pérez Rendón y Lucía Fernández Sánchez y la Mantilla por Eduardo Nevado Romero. El Coro al completo se postró a las plantas de la Divina Pastora, y al canto de la Madre Mía, lo entregó para su mayor Gloria en gratitud.LE HA REGALADO EL CORO DE SUS AMORES
BELLA AZUCENA
PARECE LA PASTORA
DE MI ARACENA.
¡¡¡VIVA LA DIVINA PASTORA!!!

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